¿Que es el método Pikler?
La metodología Pikler es un método de crianza conocido principalmente por la teoría del movimiento libre y sus beneficios en la infancia.
Esta metodología defiende lo beneficioso que es para el desarrollo de los bebes poder alcanzar los hitos evolutivos por si mismos, sin ayuda externa (padres o cuidadores).
Por eso el método Pikler promueve un modelo educativo y de aprendizaje que fortalece la autonomía y autoconfianza de los niños desde los primeros meses de vida.
Como padres y madres hemos escuchado muchas veces que a determinada edad nuestros hijos deben alcanzar ciertos hitos: A los 3 meses sostener la cabeza, a los 6 meses mantenerse sentados, al año caminar…etc.
El método Pikler nos propone confiar en el instinto innato de nuestros niños, a no exigirles ni presionarles para que alcancen parámetros a los que no están preparados. A ser pacientes, con respeto y amor.
Emmi Pikler y su visión de la crianza
Emmi Pikler (1902-1984) fue una pediatra nacida en Hungría y directora de un orfanato en Budapest.
En esta época era muy frecuente que los niños sufrieran del “síndrome de hospitalismo” debido a la falta de una figura de apego, algo que afectaba enormemente al desarrollo psicomotor y emocional de los niños.
Movida por esta problemática, desarrolló un método educativo para cubrir lo que consideraba las principales necesidades de los niños: El apego y la autonomía.
Emmi Pikler defendía que si los niños se sentían arropados y seguros con unos vínculos afectivos estables, podrían centrarse en su desarrollo sin intervención externa, fomentando así su autonomía y confianza.
Principios del método pikler
El método educativo que creó Emmi pikler se basa en 3 importantes principios:
1. El movimiento libre
Este es el principio más conocido de la metodología pikler, que defiende la NO intervención de los adultos en el desarrollo psicomotriz de los niños. Los padres y cuidadores tenemos el papel de acompañar y dar seguridad permitiendo que nuestros hijos alcancen los hitos evolutivos por si mismos.
Aplicando el principio del movimiento libre en la infancia no les forzamos a alcanzar objetivos, permitiendo que sigan su propio ritmo de desarrollo.
Así los niños crecen de forma mas estable y con un mayor entendimiento de ellos mismos, obteniendo un desarrollo postural y del equilibrio óptimo.
Teoría del movimiento libre en bebés
Según este principio Pikler, los bebés siempre se colocan boca arriba, permitiendo que adquieran por si mismos la habilidad de girarse, dar la vuelta, tomarse boca abajo, reptar, gatear, etc. También propone evitar el uso de objetos que limiten su movimiento, como tronas, andadores o cochecitos.
2. Relación afectiva privilegiada
El metodo pikler nos dice que los adultos debemos favorecer un vinculo afectivo de calidad, aportando a los niños una seguridad emocional que les permita desarrollarse libremente.
Una relación afectiva privilegiada significa dar los cuidados necesarios a los niños con respeto y cariño, siguiendo sus ritmos y necesidades. Para esto es de vital importancia la comunicación verbal y expresiva, anticipando nuestros actos para mantener una comunicación receptiva.
Al aportar cuidados básicos a bebés como puede ser cambiar un pañal, por ejemplo, debemos explicarles con amor lo que vamos a hacer: “Cariño voy a cambiarte el pañal para que estés más cómodo, ¿vale?”
Recuerda que aunque no sean capaces aún de entender nuestras palabras, la comunicación incluye nuestros gestos y tono de voz.
3. Respeto a la autonomía: El juego libre
La metodología Pikler defiende que cada niño es el protagonista de su propia evolución. ¿Te suena esa frase que dice “cada niño es un mundo”? Hay que confiar en cada niño, respetando sus intereses e iniciativas a la hora de escoger juegos y relaciones sociales.
Siguiendo la teoría del movimiento libre, Pikler defiende que los cuidadores debemos ofrecer materiales seguros para que los niños jueguen en libertad.
Los materiales de “juego desestructurado” motivan a los niños a aprender sin dar pautas de uso o reglas de juego, beneficiando su autoconocimiento.
Movimiento libre y el juego
Como ya hemos comentado, el tipo de material, mobiliario y juguetes que ofrezcamos a nuestros hijos debe incentivar a los niños a descubrir por si mismos sus posibilidades.
De esta manera estaremos favoreciendo un juego desestructurado que apoye el desarrollo de la personalidad e intereses personales de cada niño.
Materiales y juguetes Pikler
Estos son algunos de los materiales y juguetes Pikler más conocidos y recomendados:
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Beneficios del método Pikler y el movimiento libre en la infancia
Los principios del movimiento libre en bebés y de la metodología Pikler en la educación de nuestros hijos resultan muy beneficiosos para su desarrollo tanto físico como emocional:
♥ Su desarrollo psicomotriz será más natural y seguro, adoptando postural corporales saludables según su etapa de desarrollo.
♥ Desde una edad temprana aprenderán sobre los límites y posibilidades de su propio cuerpo, aportando un autoconocimiento para controlar situaciones cotidianas de forma más segura.
♥ Al no forzar pasos evolutivos desaparece la frustración y aumenta la autoconfianza, permitiendo que su personalidad se desarrolle de forma saludable.
♥ El juego libre favorece la creatividad y la imaginación, permitiendo que jueguen según sus intereses sin normal o supervisión.
¿Cómo aplicar el método Pikler en casa?
La parte más difícil de aplicar esta metodología en casa es ser capaz de observar a tu bebe desde otra perspectiva.
Debes confiar en su capacidad innata de desarrollarse y alcanzar los hitos evolutivos, manteniendo tú un rol de acompañante, y aportando apoyo emocional y afectivo.
Otras consideraciones a tener en cuenta:
- Ponle al bebé ropa cómoda para facilitar su movimiento libre. Si no hace frío y puede estar descalzo, mucho mejor.
- Intenta no utilizar materiales que limiten o condicionen su movilidad, cómo andadores o tronas.
- Asegúrate que el entorno del hogar es seguro para que pueda moverse y explorar de forma autónoma, sin la constante intervención de un adulto.
- Ofrece materiales seguros que fomenten un juego desestructurado para que experimente a su gusto.
- Como adulto debes estar siempre presente para cubrir sus necesidades de afecto y apego, intentando no intervenir en su movimiento a menos de que tu bebé lo reclame.
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